Prometió lanzar una intensa campaña de deportación en caso de ser presidente de nuevo
Donald Trump acusó el martes al presidente Joe Biden de desatar un “baño de sangre” en la frontera entre Estados Unidos y México, intensificando su retórica incendiaria mientras hacía campaña en dos estados reñidos de la región centro-norte del país, que probablemente serán cruciales para el resultado de las elecciones de fin de año.
Trump, que ha acusado a los migrantes de “envenenar la sangre del país” y prometió lanzar la mayor operación de deportación interna en la historia de la nación si gana un segundo mandato, afirmó que Biden ha permitido un “baño de sangre” que está “destruyendo el país”. En Michigan, calificó como “animales” a los migrantes que están en Estados Unidos sin autorización y son sospechosos de cometer delitos, utilizando un lenguaje deshumanizador que, según estudiosos del extremismo, aumenta el riesgo de violencia.
“Con el corrupto Joe Biden, cada estado es ahora un estado fronterizo. Cada poblado es ahora un poblado fronterizo, porque Joe Biden ha traído la carnicería, el caos y la muerte de todo el mundo y los ha vertido directamente en nuestros patios traseros”, dijo Trump en Grand Rapids, donde estaba flanqueado por policías uniformados ante una hilera de banderas.
Tema electoral
Aunque los delitos violentos han disminuido, Trump y otros republicanos han aprovechado varios crímenes graves cometidos por migrantes que se encuentran ilegalmente para atacar a Biden.